El Obelisco más antiguo de Roma fue un trofeo de guerra. El Egipto fue conquistado y renominada provincia Romana en el 30 a.C. y no soltanto desperto el imaginario del pueblo romano, los emperadores codiciaban trofeos desde estas tierras conquistadas, un hombres rico y importante como Gaio Cestio Epulone quiso como tumba le construyeran una Piramide en Roma.
El Obelisco Lateranense fue realizado en la época de los faraones Tutmosis III e Tutmosis IV 1500 años A.C. y esto lo hace el obelisco más antiguo de Roma, el emperador Augusto deseaba ese trofeo de guerra en Roma , pero soltanto en el 357 D.C. Constanzo lo transporta a través del Nilo llevandolo hasta Alexandria donde lo esperaba una grande embarcación con más de trescientos remadores.
Su destinación era el Circo Máximo
El Obelisco Lateranense proviene del templo a AMON-RA a Tebas en Egipto e llevado a Roma como trofeo de guerra para ser puesto en el centro del Circo Máximo donde se realizaban carreras de carrozas tirados por 4 caballos, eran dos los obeliscos que se encontraban en este circo y que aun se pueden apreciar en Roma; El Obelisco Lateranense y el Obelisco Flaminio.
Los Romanos colocaban estos obeliscos sobre soportes de bronce dorado, terminada la época gloriosa de Roma, los depredadores de esta ciudad encendían fuego a un lado de la base de los obeliscos, el metal cedía y la extructura caían y se podrían apoderar del metal precioso.
En el 1587 lo encontraron en tres pedazos los dos obeliscos del Circo Máximo y por voluntad del Papa Sisto V el obelisco del templo de AMON-RA fue colocado por el arquitecto Domenico Fontana, en San Giovanni in Laterano a pocos pasos de la Madre de todas las iglesias y del primer bautisterio cristiano
Cómo llegar desde Termini al Obelisco de San Giovanni
Si estás en Roma Termini, la estación central de trenes, y te interesa descubrir uno de los monumentos más impresionantes y antiguos de la ciudad, no puedes perderte el Obelisco Lateranense, ubicado en la Piazza San Giovanni in Laterano. Este imponente obelisco egipcio no solo es el más antiguo de Roma, sino también el más alto de la ciudad. Su historia, tamaño y ubicación junto a la Basílica de San Juan de Letrán lo convierten en una visita imprescindible para los amantes de la arqueología y los secretos de la Roma imperial.
¿Qué es el Obelisco de San Giovanni?
Conocido como el Obelisco Lateranense, fue traído desde el Templo de Amón en Karnak (Egipto) en el siglo IV d.C., por orden del emperador Constancio II. Tallado en el siglo XV a.C. bajo el faraón Tutmosis III, este obelisco tiene más de 32 metros de altura (más de 45 m con la base) y está ricamente decorado con jeroglíficos. Hoy se alza majestuoso frente a la Basílica de San Juan de Letrán, una de las cuatro basílicas mayores de Roma.
Cómo llegar al Obelisco de San Giovanni desde Termini
🚇 En metro (rápido, directo y económico)
- Desde la estación Termini, toma el metro dirección Anagnina
- Baja en la tercera parada: San Giovanni
- Al salir, camina menos de 3 minutos hasta Piazza San Giovanni in Laterano
🕒 Duración total del trayecto: 8 a 10 minutos
🚶♂️ Caminando (para los amantes del paseo urbano)
Si prefieres caminar, desde Termini puedes llegar en aproximadamente 25 minutos. La ruta más directa es por Via Merulana, una avenida recta que conecta ambos puntos y te permite descubrir otras iglesias y rincones romanos en el camino.
🚌 En autobús
También puedes tomar la línea de autobús 714 desde Termini (Via Giolitti) y bajarte en Piazza San Giovanni. Aunque más lenta que el metro, es una opción válida si prefieres no bajar al subsuelo.
Qué ver en la zona del Obelisco Lateranense
Además del obelisco, la Piazza San Giovanni ofrece varias joyas:
- Basílica de San Juan de Letrán, catedral de Roma y sede episcopal del Papa
- La Escalera Santa (Scala Santa), traída desde Jerusalén según la tradición
- El Bautisterio Lateranense, uno de los más antiguos del cristianismo
Todo esto convierte la zona en una parada cultural de primer nivel.
Llegar desde Termini al Obelisco de San Giovanni es sencillo, rápido y merece totalmente la pena. El obelisco más antiguo de Roma no solo impresiona por su tamaño, sino por la historia milenaria que lo conecta directamente con el Antiguo Egipto y el poder imperial romano. Una joya al aire libre que no requiere entrada, y que puedes disfrutar en cualquier momento del día.